El aire acondicionado con tecnología Inverter es uno de los sistemas de climatización más adecuados para propiciar un aire respirable y sano, para vías respiratorias y la piel. Esto es lo mejor para personas que son sensibles a los irritantes, y vaya que hay muchos de esos compuestos, que se originan en nuestro propio hogar o lugar de trabajo, por no decir de los contaminantes que existen en los exteriores.

Hay que encontrar el clima portátil o fijo, que cuente con los filtros convenientes, para captura y eliminación de cualquier irritante cutáneo o respiratorio, que atente contra la salud.

Los irritantes cutáneos son aquellos que afectan diversas zonas de la piel, y se pueden dividir en primarias y secundarias. Las primeras producen inflamación en la dermis, porque el irritante entró en contacto directo con la piel. Mientras que las secundarias, tendrá un efecto similar pero en varias partes del cuerpo o abarcando un área extensa; la inflamación es originada por una exposición sistemática a una sustancia determinada.

La dermatitis es una afección que pasa por varias etapas de no tratarse adecuadamente, y por no arreglar el problema de raíz en la exposición a ciertos contaminantes. Comienza por enrojecimiento e irritaciones leves, que pudieran llevar a una hinchazón en la zona afectada. Lo preocupante viene después, con la repentina aparición de ampollas; esta fase es muy avanzada, y se corre el riesgo de que tales erupciones se revienten, para dar lugar a una infección séptica. Esto llevará a una posible intervención médica más seria.

No hay que confiarse, porque el problema suele aparecer en manos o pies, pero se pueden alargar en todas las extremidades e incluso, a partes del cuerpo impensables. Además, si el foco de exposición no disminuye, es seguro que el problema persistirá y hasta empeorará. Por ello, es importante mantener una ventilación constante, con aire acondicionado industrial y de preferencia con tecnología Inverter, para depurar los irritantes que pululan en un ambiente dado.

La irritabilidad de ciertas sustancias podría llevar a una persona a desarrollar alergias normales, en cualquier etapa de la vida. El problema viene cuando se produce una sensibilización a las sustancias dañinas, orillando a una creación de alergia crónica. Existen muchas sustancias que son potencialmente alérgenos.

Tipos de sustancias irritantes y cómo evitarlas con ventilación y clima industrial

  • Químicos varios. Sobre todo los álcalis y ácidos de potente reacción. Estos son capaces de penetrar la dermis, formando úlceras que son complicadas de tratar. Es trascendental que en empresas que se labore con esta clase de sustancias irritantes, haya una ventilación y extracción óptima en todo momento, con aire acondicionado industrial que no solo provea confort térmico, sino también una depuración para contaminantes de todo tipo. Esto es esencial en áreas industrializadas que laboran con insecticidas, cromatos, bicromatos, naftalenos, ácidos crómicos, componentes niquelados, mercurio, formaldehídos y otros tantos irritantes que causan dermatitis severas.
  • Sustancias disolventes y desengrasantes. Estos compuestos se adhieren con facilidad a la piel y mucosas en general. Laborando con dichas materias primas, será necesario tener una extracción o nebulización constante, para purificación de aire, con clima industrial que provea aire puro de calidad. Aguarrás, parafinas, tricloroetilenos, derivados de petróleo y disolventes en general, son las sustancias más dañinas para la dermis y cavidades respiratorias.
  • Algunas maderas duras, el azúcar, cementos, algunos tipos de antibióticos, cierto tipo de flores, entre otros elementos similares, llegan a causar dermatitis en personas sensibles.
  • Hullas y alquitranes. Estos son capaces de producir úlceras o verrugas malignas en el organismo humano, que esté contantemente expuesto a un ambiente incontrolado de tales compuestos.

Reducción de irritantes con ayuda de ventilación y aire acondicionado industrial

Tal vez lo más importante en estos casos, es que se proteja el entorno de trabajo para evitar la aglomeración y diseminación de sustancias dañinas. La extracción y hasta pulverización con sistemas nebulizadores, podrían ser excelentes aliadas para la sana climatización de la industria.

El personal debe estar siempre bien protegido, con equipo especial, que evite un contacto directo con compuestos. Si se labora con elementos corrosivos, lo más sensato es que los trabajadores expuestos, contantemente cambien su indumentaria y nunca exponerla en exteriores con otras personas.

Limpieza y sanitización de áreas comunes, para que no haya una contaminación cruzada, que llegue a afectar mobiliario y prendas de otras personas ajenas a las operaciones con dichas sustancias. Asimismo, el clima industrial debe estar siempre en perfecto estado.