Muchas empresas caen en el error de solo ventilar la suciedad y demás contaminación hacia la atmósfera, con solo aplicar ventilación o extracción, sin su debida filtración, contaminando aún más el entorno circundante, causando crisis ambientales en grandes ciudades. No tener cuidado con eso podría representar severos castigos y penalizaciones por parte de organismos gubernamentales. En ese sentido, los sistemas de clima industrial deben estar en su punto óptimo de funcionamiento, durante todos los días del año.

Por ningún motivo se deberían descargar humos, polvos y gases tóxicos hacia la atmósfera, por lo que cada punto de salida o elementos de escape, tendrían que estar provistos con filtros de aire avanzados, capaces de retener y eliminar la polución con las micras más mínimas, como los que poseen los gases y los mismos virus.

Una adecuada red de purificación de oxígeno dentro de un sistema eficiente de aire acondicionado industrial, debería erradicar los contaminantes, posterior a ser ventilados desde áreas interiores, antes de que salgan al medio ambiente.

Ahora, existen ciertos factores que determinan una óptima eliminación de material particulado esencialmente peligroso. Primero es la determinación de las características que poseen cada una de las poluciones, de acuerdo al tipo de partícula y la cantidad que pulula en un ambiente industrializado. Asimismo, es importante saber el caudal de ventilación que existe en los conductos, así como el grado requerido en la eliminación del contaminante. Todos estos puntos influirán positiva o negativamente de manera significativa en los dispositivos que se vayan a instalar para el sistema de clima industrial.

Asimismo, para el correcto diseño, habría que tomar en cuenta otros temas, como seguridad contra incendios y explosiones, y eso precisamente lo determinará el tipo de filtros que se aplicarán, decidiendo cuáles son los ideales para cada área o punto de salida, si los filtros para captación de polvos o los purificadores de aire.

Ahora, hay que remarcar que la mayoría de los filtros están diseñados para la eliminación de polvos en concentraciones relativamente bajas, que no excedan una unidad de granos por 1000 pies cúbicos de aire. A menos que el aire acondicionado industrial o ventilación lleguen a requerir filtros industrializados para lidiar con cargas mucho más pesadas. Generalmente, estos equipos robustos son los colectores de polvo, que suelen manejar concentraciones de hasta 20 000 veces más que lo que suelen lidiar los filtros de aire normales.

A final de cuentas, todo radicará en cómo se aplica la ingeniería de aplicaciones en cada una de las áreas que conforma una nave industrial o complejo de oficinas. Sabiendo la adecuada planeación y aplicación de estos aspectos, es como se logrará una prevención óptima en los riesgos ocupacionales laborales, para la salud de todas las personas, ya sea en la instalación y uso de filtros unitarios en toda una red de ventilación, o en el uso de sistemas principales para la captura de polvos en grandes cantidades.

Ahora, es importante saber que la eficacia y eficiencia de los sistemas de filtración, están muy ligadas a la incidencia de contaminación de un ente industrializado, no importando si este es remoto a una ciudad grande o campos de cultivos. Además, esto también se debe mucho a que no hay una anticipación en la construcción de nuevas zonas residenciales, las cuales pueden sufrir mucho los embates de una polución atmosférica generada por las fábricas, con una inadecuada filtración de polvos y químicos que se generan desde las entrañas de las naves.

En ese sentido, actualmente cualquier fábrica debe cumplir con las mismas normas de seguridad ecológica, no importando si es un emplazamiento que se halla en un lugar muy alejado de la civilización, o si está en las cercanías de un centro urbano. El aire acondicionado industrial con filtración óptima debe estar en su punto.