Las estructuras de climatización a niveles industrializadas son fundamentales para una edificación de gran envergadura. Cada área precisa de características especiales en cuanto a atmósferas internas, dependiendo de su naturaleza de trabajo. Es decir, unas requerirán control de humedad, otras una aire frío o caliente, algunas una calidad de aire puro, etc.

En una nave industrial de grandes dimensiones, la gestión del clima interno es fundamental para garantizar un entorno de trabajo seguro, eficiente y cómodo. La estructura de un sistema de clima industrial incluye aire acondicionado, mecanismos de ventilación y extracción, humidificación, deshumidificación y purificadores de aire. Cada uno de estos componentes debe instalarse y gestionarse adecuadamente para optimizar su rendimiento y eficiencia.

Aire acondicionado industrial

El aire acondicionado en una nave industrial de grandes dimensiones tiene el objetivo principal de mantener una temperatura adecuada y confortable. Para lograr esto, es necesario instalar unidades de aire acondicionado de alta capacidad, generalmente divididas en múltiples unidades distribuidas estratégicamente por la nave. Estas unidades deben estar conectadas a un sistema de conductos bien diseñado que permita una distribución uniforme del aire fresco.

Las unidades de aire acondicionado industrial suelen ser más grandes y potentes que las utilizadas en entornos comerciales o residenciales. La instalación debe considerar aspectos como la ubicación de las unidades para facilitar el mantenimiento y la reparación, así como la eficiencia energética para reducir costos operativos. Además, se deben implementar componentes de control centralizado que permitan ajustar la temperatura de manera precisa en diferentes zonas de la nave.

Sistemas de ventilación y extracción en clima industrial

La ventilación y extracción son cruciales para mantener la calidad del aire y garantizar un flujo constante de aire fresco dentro de la nave. Estos sistemas ayudan a eliminar el aire viciado, el calor excesivo y los contaminantes del aire, como polvo y vapores industriales.

Para una nave industrial grande, se debe diseñar un dispositivo de ventilación que incorpore tanto ventiladores de suministro como de extracción. Los ventiladores de suministro introducen aire fresco desde el exterior, mientras que los ventiladores de extracción eliminan el aire viciado del interior. La instalación de estos sistemas debe estar bien planificada para garantizar una circulación de aire eficiente y evitar puntos muertos donde el aire no circule adecuadamente.

En áreas específicas donde se generan grandes cantidades de contaminantes, como zonas de soldadura o procesos químicos, se deben instalar extractores puntuales para eliminar directamente los contaminantes en la fuente. Además, es importante considerar la presión del aire dentro de la nave para evitar problemas de presión negativa o positiva que puedan afectar la estructura del edificio o el funcionamiento de las puertas y ventanas.

Humidificación en clima industrial

La humidificación es esencial en naves industriales donde los procesos o el almacenamiento de productos requieren niveles específicos de humedad. La falta de humedad puede causar problemas como electricidad estática, resequedad en materiales y malestar en los trabajadores.

Para instalar un sistema de humidificación, se deben usar humidificadores industriales que puedan manejar el gran volumen de aire dentro de la nave. Estos mecanismos deben estar integrados con el sistema de climatización general para distribuir la humedad de manera uniforme. La ubicación de los humidificadores debe ser estratégica para evitar áreas con exceso de humedad que puedan llevar a problemas como la condensación y el moho.

Deshumidificación en clima industrial

Por otro lado, en ambientes donde la humedad suele ser perjudicial, es necesario un sistema de deshumidificación. Esto es especialmente relevante en industrias como la farmacéutica, electrónica o alimentaria, donde la humedad alta puede dañar los productos y afectar los procesos de producción.

Los deshumidificadores industriales deben ser potentes y capaces de manejar grandes volúmenes de aire. Al igual que los humidificadores, estos dispositivos deben integrarse con el sistema de climatización para garantizar una distribución uniforme del aire seco. Se debe prestar atención a la instalación de estos mecanismos para asegurar que la humedad se mantenga dentro de los niveles deseados sin generar zonas excesivamente secas.

Purificadores de aire

Finalmente, los purificadores de aire son fundamentales para eliminar partículas finas, contaminantes y alérgenos del aire, mejorando así la calidad del aire interior. En una nave industrial grande, se requieren purificadores de aire de alta capacidad que puedan filtrar grandes volúmenes de aire.

La instalación de estos sistemas debe ser cuidadosa, ubicándolos en áreas donde la concentración de contaminantes sea más alta. Los purificadores deben ser accesibles para el mantenimiento regular y el reemplazo de filtros. Además, se pueden combinar con dispositivos de ventilación y aire acondicionado para una mayor eficiencia en la purificación del aire.